Masa acrítica
En los últimos días, mis compañeros, la mayoría ellos siempre tan amigos del rebaño, andan revueltos, porque les han tocado la cartera con las medidas del gobierno. Como en todo siempre está el imbécil de turno, en este caso la imbécil. Persona que tras señalar que lo único que le importa es ella, hace alarde de patriotismo diciendo que su España está humillada y acaba apostillando que antes que a los socialistas prefiere votar a Blas Piñar. Evidentemente el asco, ya incluso físico, que me producen esas palabras y la persona que las dice me dan mucho que pensar. ¿Qué está pasando?
La verdad es que me siento muy cansado de mi gremio, el del profesorado de enseñanza y más todavía del profesorado de mi generación. Es un gremio pasivo e insolidario, aburguesado y adocenado, que lo único que le interesa es el estado de su cuenta corriente a fin de mes. No pretendo generalizar, pero sí que es cierto que entre las últimas catervas de opositores que de la noche a la mañana se convierten en funcionarios hay un tufillo de nuevo rico, de mirar por encima del hombro, de un clasismo que asquea. Hay mucho estúpido que porque tiene un par de hipotecas pagando dos casas, una de ellas en la playa, un coche imponente y está de letras hasta el cuello, se cree más que nadie. A su vez, este tipo de gente, están profundamente desideologizados, lo que los convierte en entes pasivos, sumisos e insolidarios, siendo por tanto incapaces de mostrar a su alumnado una visión crítica del mundo en el que vivimos. Primero porque para criticar hay que conocer, y segundo porque para conocer hay que saber, y son muchos los que no saben.
Este es un oficio, el de la enseñanza, que requiere de reflexión, no sólo por parte del alumno, sino también por parte del profesorado. Sin embargo, si el número de jóvenes que se están incorporando a la docencia conciben la vida como una eterna juerga de consumo desmedido ¿Dónde queda pues ese espíritu crítico necesario en toda generación para que la sociedad avance? No seré yo el que acuse del lamentable estado de la educación al profesorado, ya para eso hay informes de de sesudos sabios y normativa burocrática e inoperante. Pero por favor, no nos creamos la créme de la créme porque no lo somos.
Es evidente, con la que está cayendo, que dentro de la clase trabajadora a la que pertenecemos, somos unos privilegiados y disfrutamos de un tiempo libre que otros no tienen, pero no estaría mal que algunos asomaran las narices fuera de la burbuja de colores y olores y vieran y reconocieran no ya lo que pasa en África, sino lo que pasa en su misma calle. En definitiva estaría bien ser más solidario -palabra tan de moda que el neolenguaje ha vaciado equiparándola con caridad- y cabrearse porque el gobierno te va a quitar el 5% de tu sueldo bruto, pero no porque eso va a impedirte consumir un poco más, sino porque siempre pagan el pato del capitalismo los mismos, la clase obrera y trabajadora. La que Machado denominó: "la estirpe redentora que muele el fruto de los olivares, y ayuna y labra, y siembra y canta y llora". La que no tiene su sitio en los parlamentos y en los gobiernos. La que siempre estará destinada a la barricada.
5 comentarios
J. Carlos -
josé maría -
Es verdad que, como colectivo, solo nos movemos por el dinero. Pero también es verdad que esta pasividad que nos caracteriza (junto con la complicidad de toda la sociedad) también está ya calculada por gobiernos y dirigentes para que traguemos cada vez más (faltas de respeto, agresiones...)y nos quejemos cada vez menos.
Daniel M. -
Pedrin -
La diferencia quizas estriba en que el gremio de la Ensenyanza no se lo debe permitir, deberia marcar la excepcion a esa regla.
En tu profesion hace falta una cosa muy importante: Vocacion por la Educacion, pero muchos de tus companyeros proceden de carreras que no implican dicha vocacion, y entraron en el sistema educativo por asegurarse una plaza de por vida, nada mas. Puedes ser un gran matematico, pero tener vocacion cero por estimular el aprendizaje en tus alumnos, ya sea el aprendizaje de los contenidos propios de la materia a impartir o de los valores que transmitas como persona, y que seran mejor asimilados por tus alumnos que el 2+2=4.
Sergio -
Sin ir mas lejos, hoy he escuchado comentarios criticos al respecto y me parece increible que se quejen por eso y no por el 20% de parados que existen en el pais... que vergüenza :S.